Más de 1.600 agricultores se beneficiarán de la nueva convocatoria de ayudas de agroambiente y clima dotada con 8 millones de euros
20·03·2021
La Comunidad habilita una anualidad adicional que permitirá a los beneficiarios mantener las prácticas de conservación medioambiental en sus cultivos durante el próximo año En la Región de Murcia hay más de 37.000 hectáreas mejoradas para el cuidado de suelos y agua, protección de aves, la lucha biotecnológica o el triturado de restos de poda
El Gobierno regional va a destinar más de 8 millones de euros para la nueva convocatoria de ayudas de Agroambiente y Clima durante el año 2022. Se trata de una anualidad adicional habilitada tras el periodo del Programa de Desarrollo Rural de la Región de Murcia 2014-2020, que cuenta con la cofinanciación del Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Feader), orientada a beneficiar a aquellos agricultores que integran dentro de su actividad acciones encaminadas a la mejora del medio ambiente como el mantenimiento de la biodiversidad, la reducción del consumo del agua o la lucha frente al cambio climático.
En total, 1.608 agricultores podrán beneficiarse de estas ayudas que, desde que se pusieron en marcha, han supuesto hasta 2020 más de 32 millones de euros, a los que se sumarán 7,6 a abonar en los próximos meses y la nueva anualidad de 8 millones para el próximo año, enmarcada en el periodo transitorio hasta la aprobación del nuevo programa de ayudas.
Así queda recogido en la publicación de hoy del Boletín Oficial de la Región de Murcia, lo que “permitirá a aquellos agricultores que adquirieron la condición de beneficiario en 2015 acceder a las ayudas que actualmente han permitido mejorar más de 37.000 hectáreas de cultivo en la Región”, explicó el consejero de Agua, Agricultura, Ganadería, Pesca y Medio Ambiente, Antonio Luengo.
El consejero destacó que “gracias a este esfuerzo del Gobierno regional se premian las acciones encaminadas a la protección de las aves esteparias, la trituración de los restos de poda, la conservación del agua y los suelos, la lucha biotecnológica, el mantenimiento de razas autóctonas en peligro de extinción, la racionalización del pastoreo o la protección de la Red Natura 2000”.
“El futuro de la agricultura y la ganadería es un pilar fundamental dentro de nuestra apuesta por el cuidado del medio ambiente. Son la mejor herramienta para combatir el cambio climático y sus efectos, especialmente en el sureste español, para frenar la erosión del suelo y para hacer frente al problema de escasez hídrica. Los agricultores y ganaderos son los mejores aliados para ello, pero para eso necesitan de ayudas que les permitan apostar por la sostenibilidad, y eso es lo que hacemos gracias a esta nueva anualidad adicional”, añadió Luengo.
Durante el periodo 2015-2020, y como ejemplo de los resultados obtenidos por las ayudas, destacan los 560 agricultores beneficiados en la línea de lucha biotecnológica para el uso de técnicas de bajo impacto sobre el medio ambiente, con la sustitución mayoritaria de la utilización de la lucha química, por técnicas de lucha biotecnológica contra plagas mediante uso de depredadores y parasitoides.
Tras ello, los 400 agricultores beneficiarios de la línea para la protección del paisaje agrícola de la Red Natura 2000 o los 300 para la conservación de suelos y aguas, dado que la pérdida del suelo fértil trae consigo la dificultad de retener el agua de lluvia y la pérdida de las cubiertas vegetales, lo que da lugar a importantes pérdidas de biodiversidad, valor agrícola del suelo y capacidad de retención de CO2.
Junto a ello, es “especialmente importante la línea de ayudas para la trituración de biomasa, de restos de podas agrícolas, ya que contribuye a mejorar el contenido del suelo en materia orgánica y, por lo tanto, mejora su fertilidad y su capacidad como sumidero de CO2, en sintonía con la regulación adoptada en la Región que prohíbe la quema de restos de poda”, resaltó el consejero, quien añadió que “más de 100 agricultores se han beneficiado de ello durante este periodo”.
En cuanto a la protección de las aves esteparias, se han apoyado más de 13.000 hectáreas, que han beneficiado a más de 100 agricultores que han modificado algunas prácticas tradicionales de cultivo, como dejar un diez por ciento de la cosecha sin recolectar o el retraso en la misma para mejorar las condiciones de alimentación y reproducción de estas especies. En materia de mantenimiento de razas autóctonas en peligro de extinción, han sido 14 los ganaderos de la Región que han podido recibir estas ayudas.
Las ayudas de esta anualidad adicional están financiadas en un 63 por ciento por el Fondo Europeo de Desarrollo Rural (Feader), un 11,1 por ciento por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, y un 25,9 por ciento por la Comunidad Autónoma, a través de la Consejería de Agua, Agricultura, Ganadería, Pesca y Medio Ambiente.
Fuente: CARM